jueves, 23 de agosto de 2012

DISCOVELY JR



Pues no, no ha podido ser, seguimos sin hablar de pesca ya que este agosto me está resultando nefasto.
El otro día, me fui a comprar al Deca una sombrilla y cuando llego a casa veo que lleva unos complementos, unos faldones para proteger del viento, creo que es. Observo bien su dibujo y veo que tiene forma de vela, y claro, como uno no puede estar quietecito, pues nos ponemos manos a la obra.
La superficie de la vela es de 1m2 aproximadamente, muy pequeñita pero increíblemente hace avanzar el kayak bastante.
Tiene una especie de bolsitas, no se si para poner trastos o arena, esos bolsillos se los he recortado y parece que ahora funciona mejor.
 
El mástil es un palo telescópico de pintor que tenía por casa, jeje
De momento la vela se une al mástil con unas tiras de goma de neumático que he recortado y que ato a los vértices de la vela. De esta forma evito que desgarre. Cuando se me ocurra algún sistema de anilla o similar, lo modificaré.
La vela se apoya en un cañero vertical que llevo en la consola delantera y la fuerza la hacen los dos obenques laterales. Le pongo un estay delantero pero más que nada por si quiero inclinar o atrasar un pelín la vela en función del rumbo que deseo llevar.

 
La vela lleva botavara y la puedo dejar bolsuda, mas o menos como en las fotos que se muestran o bien tensada para cuando el viento aprieta.
El amigo Jesús, me regaló una orza de las antiguas tablas de surf que me ha venido de escándalo. Muchas gracias a todos los que estais colaborando desinteresadamente con mis proyectos, ajajaj. Por cierto, si alguien tiene alguna orza más de estas, aquí esta el tio Marcos, jeje.
Dicha orza hace las veces también de timón, si quiero que el kayak se aproe al viento, le pongo la quilla en vertical y si quiero que vire a sotavento, la inclino un poco hacia atrás.
La sujeto con unas simples gomas cilíndricas fuertes a unos pasacabos que lleva en ese punto el kayak Disco.

 
También puedo jugar un poco con mi peso, adelantándolo cuando quiero buscar barlovento o echándolo para atrás cuando busco sotavento.
Después de muchas pruebas, lo que se deduce es que los accesorios tienen que estar bien amarrados. En el momento que la quilla baile un poco o la vela pierda verticalidad, se pierde muchísimo en efectividad. El kayak ciñe bien.
Lo que interesa a mucha gente, la velocidad, jeje. Pues todavía no he navegado con las condiciones más favorables pero pienso que puede acercarse a su papa el “Discovely”.
El otro día le tomé una máxima de 11’1 km/h con el viento soplando a 13 nudos, justo antes de que la vela saltara por los aires, la botavara se desatara, etc. El kayak no toleraba tales vientos y olas y tuve que volver remando, jeje.
Yo calculo que navegando con mar en calma y poniente de unos 10 nudos puede alcanzar los 8-9 km/h de media.
De momento no he volcado pero algún sustillo me he llevado. A ver si un día de estos hago un simulacro.
Bueno, amigos, aquí una nueva propuesta veraniega. Seguro que uno que tiene un Disco y que no quiero señalar incluso se lo está planteando, jeje. Más sencillo y barato imposible.
Saludos.